domingo, 12 de febrero de 2023

El mal genio y la mala suerte: ¿una cuestión del pie izquierdo?

Con cuál pie te levantes cada mañana no es una cuestión de designios del cual dependan la suerte o humor del día. Así que, cualquiera sea el pie con el que te levantes, si has despertado de malas ganas y con un geniecillo que ni tú mismo te soportas, éso simplemente es debido a que, tanto tu conducta como comportamiento, están bajo dominio de esas desagradables emociones, volviéndote irritable, ofuscado, malhumorado, despectivo, malagracia y cuanto demás. Igualmente, ocurre en el caso de esa posible mala suerte de la que pudieras estar refunfuñando cierto día, y ésto porque cualquiera en un estado de ofuscación creerá incluso ser un desdichado o sujeto de algún conjuro diabólico.
Es cierto que el sentido nervioso está en todas partes del cuerpo, y si se trata de los pies, ocurrirá que cualquiera de los estímulos sobre los mismos - dígase a través del tacto - producirán una reacción, anterior y velozmente procesada en el cerebro, que no necesariamente será el mal humor o mala suerte, rigiendo la conducta y comportamiento de la persona por 24 horas, a causa del pie izquierdo.
Es claro también que "levantarse con el pie izquierdo" es un dicho popular, y que data de épocas anteriores en las que las creencias podrían sobreponerse a las explicaciones científicas del conocimiento del cerebro. Es por eso que, a estas alturas del caso, quien con tal dicho popular quiera excusar su malhumor, y ese mismo alterando el estado emocional de otros, ya no le será suficiente, ni la salida fácil para que los demás deban soportar su mal carácter. Esta vez, deberá admitir que él o ella se haya auto-sometido a sus propias y desagradables emociones. Acto seguido, intentar autocontrolarse hasta que despeje la ofuscación, recupere la serenidad y vislumbre el raciocinio.
Somos seres emocionalmente racionales. Lo que quiere decir que, sí o sí, la intervención de las emociones está comprendida dentro de nuestros procesos cerebrales. Sin embargo, la evolución ha conllevado al desarrollo de un cerebro donde predomina el pensamiento racional que - en un ejemplo - impediría no dejarte invadir por la cólera y ejecutar un acto de barbarie contra algún semejante o - en otro ejemplo - sonreír y saludar a las personas porque merecen tu respeto.
Hoy se habla de la inteligencia emocional, y no hay peor error entre los adultos que creernos autosuficientes, dar por hecho que cualquier tema está sabido porque repetimos las frases o que no va contigo, ni conmigo porque... Qué verguenza, ya soy un adulto!!!
Nadie puede decir que es un ser únicamente racional, ni nadie que lo es únicamente emocional. La evolución del cerebro distingue un cerebro reptiliano, al que se le sobrepone otro emocional y, sobre éste, el racional. Por tanto, la evolución cerebral, a diferencia de los demás seres vivos, nos permite más que solo respirar, comer, movernos o reproducirnos, sino sentir para despertarnos emociones capaces de inspirar lo mejor de los pensamientos e ideas.
Nadie es ajeno a dejarse dominar por cualquiera de las emociones negativas o desagradables. Pero, lo que no debería ocurrir es que tal dominio sume segundos para convertirse en minutos... Hay que detener de inmediato el conteo. Porque, así como hay bombas utilizando cuentas regresivas para hacer explosión, igualmente las emociones negativas o desagradables pueden explosionar aunque su cuenta no sea en orden regresivo.
Ninguna convivencia es sencilla porque nuestra propia naturaleza diversa hace que debamos ser lo suficiente "emocionalmente racionales" para convenir acuerdos de sana, pacífica y progresista convivencia. Sin embargo, que la misma no sea sencilla, porque dicha diversidad sea por los niveles de intensidad del malhumor y ofuscación entre uno y otro, hace que la convivencia sea imposible.
"La calle es dura", se dice mucho por ahí. Pero, además de dura hacerla insoportable porque hay más de aquellos dejándose dominar por sus propias negativas y desagradables emociones, debería obligar a todos, quienes tienen ostentan cierta o mucha autoridad sobre las personas de esta sociedad, no solo a reflexionar, sino a actuar porque lo visto en las calles es tanto la consecuencia de... como la desatención sobre...                                  
Cada quien, por su parte, respire mientras mentalmente cuenta del 1 al 20, y ésto cada vez pudiera empezar a oírse desafinado, fruncir el ceño, sudar y cambiar de rosaceo a verde el color de su rostro, porque son señales que va directo a la ofuscación, siendo la respiración, no solo la que le permita la oxigenación cerebral, sino el tiempo que el cerebro racional exige para aparecer y detener cualquier posible negativo o desagradable desenlace.                                       
Sonría. Sea amable. Trate con respeto. Vuelva a sonreír. Comparta. Vuelva a ser amable. Agradezca. Vuelva a tratar con respeto. Siempre comparta. Vuelva a agradecer. 
"Un mundo mejor" es mucho pedir por ahora, empecemos por "Un hogar mejor"... por ahí se empieza!!!